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Hoy tenemos el placer de conocer más a fondo a Pau i Yo, una marca de lencería nacida para acompañar a los diferentes momentos de tu cuerpo. Pau i Yo nace de la necesidad de hacer las cosas bien, con conciencia y responsabilidad, con mimo y en pequeño.
Lencería hecha de algodón que aúna comodidad para cuerpos reales creada para el día a día. Una marca que huye de la “lencería sexy” y apuesta por que cada persona se ponga lo que quiera sin títulos, ni limitaciones.
Pequeñas producciones, proveedores de proximidad y confeccionado por Marisol, la fundadora que creó esta idea y la ha hecho posible hasta hoy. Un proyecto inclusivo para todas las mujeres de cualquier talla o edad.
¿Cómo surgió la idea de Pau i Yo?
En el 2019 había empezado a estudiar lencería en la Escola de la Dona en Barcelona , y eso fue descubrir un mundo de posibilidades y libertades.
Desde hace muchísimo tiempo hago mi propia ropa, cansada y frustrada por no sentirme incluida en las marcas de fast fashion donde compraba habitualmente. Estudié costura y patronaje y pude solucionarlo, pero…la lencería seguía siendo un problema, por lo que hacerme yo misma las bragas que me gustaban y necesitaba fue un antes y un después.
A finales de 2019 compré 7 telas diferentes y medio metro de cada una, pensaba que muchas mujeres estarían en mi misma situación, y sin pensarlo mucho, me abrí un perfil en Instagram y me lancé a la aventura de hacer lencería para todas las que no nos sentimos ni incluidas ni representadas en la mayoría de marcas.
Hoy en día ya compro la tela por rollos de 10mts!!
¿Cómo definirías Pau i Yo? ¿Cuáles son sus valores?
Pau i Yo principalmente es empatía, porque está creada por una mujer para otras mujeres. Empecé haciendo bragas de algodón, luego sujetadores y hasta camisetas interiores. Cada producto está pensado desde la inclusión, la comodidad, la atemporalidad y la sencillez. Con cada prenda intento acompañar y respetar nuestro cuerpo, sus cambios y movimientos.
La comunicación también es un valor y pilar fundamental en este proyecto, me gusta mantener conversaciones con todas las mujeres que me escriben por alguna consulta, por contar su experiencia o simplemente agradecerme, y es una conexión muy bonita que se da entre ellas y yo, que me gusta cuidar.
Me gusta contar la historia detrás de cada producto, compartir las palabras de todas las mujeres que me escriben porque sé que pueden ayudar a otras mujeres y así crear un espacio de confianza y seguro entre nosotras.
En el mundo del retail, ¿qué importancia tiene el packaging?
La responsabilidad medioambiental también es un factor muy importante y al que presto especial atención, desde guardar todos los retales de producción para darles una segunda vida como relleno de cojines por ejemplo, hasta pensar en un packaging que sea lo más minimalista posible, pero también bonito y funcional.
La experiencia de compra comienza desde el packaging, por eso debe ser cuidado, para acompañar y guiar a la persona hasta descubrir el producto en su interior.
Y las redes sociales ,¿ son el escaparate perfecto?
Gracias a las redes sociales pude llegar a muchas mujeres, algunas clientas y otras compañeras. Cada día trabajo para ir afianzando mi comunidad, que es la que confía y ayuda a que este proyecto siga adelante. Y gracias también a las redes sociales, puedo enviar a toda España.
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¿Cómo trabajáis para ser sostenible?
Generar el menor residuo es para mí el gran desafío, por eso hago pequeñas producciones, para no tener stock sin sentido, e incluso las camisetas y sujetadores los hago bajo pedido.
Con respecto al material, en un 90% es de proveedores en España.
Próximos pasos. ¿Hacia dónde os dirigís?
En un futuro no muy lejano me encantaría poder empezar a producir pequeños stocks para llevar a tiendas en diferentes puntos de España, porque como siempre digo: las mujeres nos merecemos estar cómodas y llegando a más mujeres, este mensaje también crecerá.